La poesia. Doy la mano a la poesia.
No leo poesía porque quizás no soy poesía. Me quiero.
O quiero quererme. Quizás, y solo quizás, comprenderme.
La amo. Como amo muchas cosas. Quizás demasiadas.
Quizás demasiados quizás.
Quizás demasiado poco.